Abarth 695 Tributo Ferrari

El Abarth 695 Tributo Ferrari hizo su debut mundial en Frankfurt. Esta versión de gran rendimiento del Abarth 500 confirma el vínculo entre Abarth y Ferrari basado en valores compartidos que incluyen la pasión por el rendimiento, el alma de la competición, la atención al detalle y el estilo italiano.

Abarth y Ferrari son dos grandes nombres que han contribuido, con convicción y dedicación, a la leyenda de las carreras italianas que se conoce en todo el mundo. Los hombres legendarios detrás de ambas marcas siguieron carreras muy similares: primero pilotos, luego tuneadores y finalmente jefes de empresas que gozan de un respeto genuino en el mundo del automovilismo. Estos hombres extraordinarios fueron asociados en el pasado: en 1953, por ejemplo, nació un Ferrari-Abarth único, el Ferrari 166/250 MM Abarth. El coche corrió en varios trofeos internacionales incluyendo el legendario Mille Miglia. El vínculo entre las dos empresas se ha visto reforzado sobre todo por los sistemas de escape diseñados por Abarth específicamente para los coches construidos en Maranello: se han realizado numerosos sistemas de escape para varios modelos de Ferrari, algunos de los cuales han ganado títulos del Campeonato del Mundo.

Las dos marcas renovaron su colaboración. El primer resultado fue el suministro de una serie limitada y numerada de Abarth 500 a los concesionarios europeos de Ferrari para su uso como «coches de cortesía».

El Abarth 695 Tributo Ferrari, un vehículo exclusivo que no sólo permitía a Abarth ampliar su gama entrando en el mercado de los coches deportivos de lujo, sino que también ofrecía a los clientes de Ferrari un pequeño pero emocionante coche pequeño para todas sus necesidades de movilidad, incluida la movilidad urbana práctica.

Sólo se fabricarán 1.695 unidades para todo el mundo entre 2010 y 2013, 1.198 unidades disponibles del color «Rojo Corsa», 299 del «Amarillo Módena» y 99 del «Azul Abu Dhabi» y el «Gris Titanio» —1.695 unidades en total—. El Abarth 695 Tributo Ferrari era el 500 más potente que vendía Abarth, y además el más caro.

Se distinguía por una serie de cambios estilísticos, pero sobre todo por las modificaciones sustanciales desarrolladas por los ingenieros de Abarth y Ferrari. El motor, para empezar, es un 1.4 Turbo T-Jet 16v, afinado para desarrollar más de 180 HP. Esto se combina con una caja de cambios electromecánica MTA (Manual Transmission Automated) con cambio de marchas de pala inspirado en la competición que aprovecha al máximo el rendimiento del motor al reducir los tiempos de cambio de marchas.

Para mejorar la aceleración, el coche estaba equipado con neumáticos de altas prestaciones en llantas de aleación de 17″ con un diseño inspirado en las llantas de Ferrari. Los sistemas de suspensión y de frenado también se reforzaron para hacer frente a la potencia adicional: los discos multiseccionales de 284 mm con pinzas fijas de cuatro pistones, ambos de Brembo, y los amortiguadores especiales que permitían disfrutar de las prestaciones con total seguridad.

Y, por supuesto, había un escape de contrapresión variable «Record Monza» de «modo dual», diseñado para mejorar el rendimiento del motor y proporcionar un sonido inspirador a más de 3.000 rpm.

El Abarth 695 Tributo Ferrari tiene un botón «SPORT» en el salpicadero que modifica la respuesta del motor, la caja de cambios y la dirección. Alcanza una velocidad máxima de 225 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 7,1 segundos —6,9 segundos en modo «SPORT»—.

En el exterior, el coche está acabado en rojo Scuderia, con retrovisores exteriores de fibra de carbono y con detalles como las ruedas y las tomas de aire traseras en gris Racing Grey. Este Abarth está equipado con faros de xenón con funciones de luz de cruce y de carretera para mejorar la emisión de luz y la eficiencia en todas las condiciones meteorológicas. Fabricados por Magneti Marelli Automotive Lighting, estos elementos proporcionan tres veces la intensidad de luz y la duración de los faros estándar de las lámparas halógenas.

Los interiores también son personalizados y demuestran la atención al detalle y el estilo deportivo común a ambas marcas. Los asientos «Abarth Corsa by Sabelt» están equipados y acabados en piel negra con carcasa y base de asiento de fibra de carbono. Estos asientos ofrecen una perfecta combinación de las características de competición: ligereza (10 kg menos que el asiento estándar) y la capacidad de mantener el cuerpo estable frente a las fuerzas laterales y longitudinales, gracias a los elementos de apoyo de la carrocería rellenos de espuma resistente al aplastamiento con la ergonomía y el confort de los asientos de carretera.

El volante de cuero negro se caracteriza por sus inserciones de cuero rojo y un buje tricolor en el que están montadas las palancas de cambio del MTA, mientras que el salpicadero se fabricó especialmente por Jaeger e inspirado en la instrumentación típica de Ferrari. También en el suelo se prestó atención a los detalles: los reposapiés están totalmente cubiertos de aluminio antideslizante y los pedales de carreras están personalizados con el logotipo Scorpion. El interior también está adornado con otros detalles, como placas especiales y una placa con el número de serie del vehículo.

Fuentes:
(del comunicado de prensa de Abarth)
Imágen: Abarth 695 Tributo-Ferrari - NRMA New Cars by The NRMA - Flickr